Entre los diferentes tipos de impermeabilizaciones en Madrid que hacemos en nuestra empresa están las que se realizan en cubiertas planas con grava o gravilla, un tipo de impermeabilización que tiene como principal requisito para poder realizarse que no puede ser transitada por personas, a menos que se dejen unos pasillos o que se instale una especie de pasarelas ligeramente elevadas por las que se pueda transitar en caso de que haya alguna avería en un elemento instalado en la azotea o que se necesite realizar algún trabajo en la cubierta.

Las impermeabilizaciones acabadas en grava que realizamos en Cubiertas Imperdur, S.L. tienen la ventaja de ser una de las más económicas, porque en lugar de emplear otros materiales para proteger la impermeabilización del sol y de otros agentes meteorológicos adversos, se utiliza una capa de grava, normalmente canto rodado de 25 a 35 milímetros como máximo y con un grosor total de la capa no superior a los 5 o 6 centímetros, con el objetivo de no cargar de demasiado peso la cubierta y que se pudiera venir abajo.

Además de ser casi o nada transitable, otra característica de este tipo de impermeabilizaciones en Madrid es que no son ventiladas, pero por el contrario sí son cubiertas invertidas, cuya ventaja principal es la función combinada de aislamiento térmico y protección del sistema de impermeabilización. Se denomina así porque en estos casos el aislamiento se coloca por encima de la impermeabilización, “invirtiendo” las posiciones convencionales o tradicionales, en las que se coloca el material impermeabilizante sobre el aislamiento.